Ruta de Las Dos Madamas (Las Grajas 12/01/13) by Paparruchas

Sí, han leido ustedes bien: Ruta de Las Dos Madamas. No es que hayamos hecho la ruta Cancarix - Caudete, que ya le gustaría a alguno, sino que Alí en una de las 122.578 frases que pronunció durante la mañana incluyó ésta: Ruta de Las Dos Madamas. La frase tenía su punto de coherencia, por lo que los Tiranos presentes acordamos por unanimidad bautizar la ruta de este Sábado con ese nombre.
La excursión en cuestión transcurrió por la Sierra de Las Grajas y fué liderada por Wolf Dog, experto montañero y amigo que, con firmeza y mucha paciencia, nos guió por un bonito recorrido en tan emblemática sierrra.
Se trataba de subir a lo alto de la sierra, hacer toda la cuerda en dirección Este, bajar y hacer el recorrido inverso faldeando la sierra; una vez llegados al extremo Oeste de la sierra, subiriamos de nuevo a la cima para bajar pasando por la cueva del Peliciego, personaje que, perseguido por la administración, se echó al monte. No está lejos el día en que tengamos que seguir su ejemplo.

Dejamos los coches junto a la estación eléctrica que hay situada al pié de la solana de Las Grajas, no sin despertar recelos y sospechas del vigilante del huerto solar vecino, y sin mas dilación acometimos la ascensión a la sierra.
La subida era bastante amochaica y no tardamos en parar a quitarnos un poco de ropa; las toxinas acumuladas por los excesos navideños luchaban por salir de nuestro organismo.

Parada para quitarnos ropa.

Inicio de la subida.

La ascensión transcurrió por un cauce por el que cuando llueve desaguan las aguas desde lo alto de la sierra; dicho cauce estaba bastante limpio de matas y el suelo de piedra agarraba bastante bien, por lo que la subida, pese a ser dura, se hizo con cierta comodidad. Tuvimos que superar algún que otro escollo en el camino que no fué obstaculo para echar algunas risas y llegar a la cima de una pieza. Las vistas durante la subida eran bastante chulas.

Primeros escollos.

El Lider abriendonos camino entre dos grandes piedras.

Wolf Dog coronando una peña.

Bonitas vistas.

El sol bañando de luz todo lo que encuentra a su paso (bueno.... lo que las nubes le permiten).

Enseguida llegamos a la cumbre donde las vistas eran espectaculares.

En primer plano el Cerro del  Estudiante. Detrás, La Peñarrubia.

Vista al este de la cuerda de Las Grajas

No podía faltar la foto de Grupo.Hay que decir que esta excursión supuso el esperado regreso de Krisnamurty a las actividades campestres.

Grupo con Peñarrubia al fondo.

Bonita vista del Barranco del Buen Aire. Al fondo se vé la cuerda de La Cingla.

Vista hacia el Oeste.

Continuamos caminando a lo largo de la cuerda en dirección Este sin dejar de admirar el paisaje y el colorido de los líquenes que pueblan las rocas.

Wolf Dog nos enseñó una cueva que tiene entrada desde la cuerda y desde la pared de la umbría; como los Tiranos somos curiosos por naturaleza nos metimos dentro.

Al fondo, salida de la cueva a la umbría.

Entrada a la cueva.

El Lider saliendo.

Interior.

Más adelante veremos una foto de la salida de la cueva, que da  a la pared de la umbría.

Tras tantas emociones decidimos parar a almorzar en un pequeño barranquillo que transcurre desde lo alto de la sierra y que desciende hacia la parte Este. Tras el almuerzo utilizamos ese mismo barranquillo para descender hasta el Barranco del Buen Aire.

Extraña formación en la roca.

Lugar de almuerzo y bajada.

 

Una vez que descendimos giramos hacia la izquierda tomando el camino que atraviesa el Barranco del Buen Aire, Ahora teníamos Las Grajas a nuestra izquierda y la Peñarrubia a nuestra derecha. Seguimos el camino hasta encontrar una senda cuyo recorrido transcurre por la umbría de las Grajas pegada a las paredes.

Al Lider esta perspectiva de la Peñarubia le evoca a una tira de tocino.

Las Grajas a nuestra izquierda.

Faldeando.

Dejamos el camino y nos dirigimos a las faldas de la sierra.

Esta es la salida de la cueva por la umbría.

Poco a poco subimos por la senda hasta llegar a la base de las paredes. Hicimos un alto en el vivac que suelen usar los aficionados a la escalada.

Vivac.

Detalle de las paredes.

Allí fotografiamos para la posteridad al Lider Vitalício (El Lider) y al Lider de la etapa (Wolf Dog). Nuestro Lider Vitalicio quiso impresionarnos intentando escalar las paredes del vivac en plan Spiderman; como es un spiderman jumillano lo llamaremos Cucubeoman.

Foto protocolaria de ambos líderes.

Cucubeoman sopesando sus posibilidades.

Cucubeoman en acción.

Continuamos caminando por la senda al pié de las paredes.

Al llegar al final de las paredes giramos a la izquierda y nos encontramos de nuevo en la solana de la sierra, donde volvemos a subir de nuevo al alto de Las Grajas, He aquí el "por qué" de la Ruta de las Dos Madamas". No es que sean dos, sino que es la misma pero dos veces.

Vuelta a la solana.

Vuelta a subir.

Sierra del Buey desde Las Grajas.

Curiosos peñascos.

De nuevo en la cima. Cuerda de La Cingla.

Ahora ya iniciamos la bajada  haciendo un alto en la cueva del Peliciego. La bajada era bastante repentina pero, al igual que la subida, el firme ofrecía un agarre perfecto, así que pusimos a prueba las suelas de nuestras botas. Lástima que Sir William no nos pudiese acompañar para poner a prueba las suelas de las suyas debido a ........ejem,......ejem......, .....¡¡¡¡problemas con la conexión a la red eléctrica de su despertador!!!!.

Empezamos a bajar.

Entrada a la Cueva.

Cuesta un poco pero aquí estan las pinturas rupestres.

El Lider a la entrada de la cueva.

Piedra desprendida a la entrada.

Ahora sí, volvemos hacia los coches.

Alí se nos quedaba atrás.

Llegada a los coches y estiramientos.

Y final de una muy buena excursión que habrá que repetir para los Tiranos que no han podido venir a esta. Vale la pena. También agradecimientos para Wolf Dog, que se va  apuntar a más de una, por guiarnos en esta ruta.

El trakc de la excursión se puede ver en el siguiente enlace:
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8656470

Por último hay que decir que tenemos nuevo material para la saga "Madame Petardí y sus cosicas"; esta vez lo podemos ver cómodamente sentado en un sillón que algún desaprensivo dejó en medio del monte. Aunque hay que decir que a Mme.Petardí le vino de perlas, solo le falta la cervecica en la mano.